y perdiéndome hacia el infinito escojo las papeletas de un sorteo cuyo
premio está aún por decidir. Sólo juegan los valientes y en el mundo que mi
mente colorea sólo pernoctan los humildes, cuyas ropas visten únicamente los locos.
El amor dentro de mí se esconde como lo hace el niño que juega al escondite,
y aunque todos ya se fueron, desea ser encontrado. ¡¡ Oh Julieta !! ¿Por qué
me dejaste en el naufragio y acompañado de ballenas?
Atravieso el aire que alimenta mis pulmones y las alas de las que carezco
me empujan hacia una calle que debiera estar en silencio. Y el mar espera
ser tragado por mi garganta que apurará hasta la última gota de sus
profundidades.
El arte es un susurro notarial que viaja, que se abre paso
entre tempestades, que te contrata y que se apodera de tu sueño.
La vida, un público que debiera estar siempre aplaudiendo.
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